Lo inexplicable de la soberbia y la inteligencia desmedida, con la mezcla del ateísmo desenfrenado y altivez humanoide.
Ya tenemos el ejemplo claro que no lograremos nada, como nación, si seguimos dándole pleitesía a los que se suben a un altar y de él no se quieren bajar, hasta que la muerte los reclame sin mediar.
Fernando Flores, este emprendimiento digital que vio su motivación en los trabajos que emplazaste cuando el Pueblo Chileno era gobierno, hoy te desconocemos como individuo.
Quien deshecha al hijo, no tiene como construir un camino.
Para Iván Morán, el IM1 de Chileprimero.
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